En una reunión reservada que mantuvieron durante más de siete horas en la sede de la Gobernación bonaerense, Axel Kicillof, Sergio Massa y Máximo Kirchner intentaron acercar posiciones en torno al futuro del peronismo ampliado, en la antesala del cierre de alianzas para los comicios del 7 de septiembre. Aunque no lograron consensuar candidaturas, sí acordaron un esquema de “apoderados cruzados” para garantizar el control compartido del frente electoral. “Solamente ellos tres”. Con esa frase escueta pero categórica, fuentes cercanas al encuentro dejaron en claro la exclusividad y relevancia del cónclave. El objetivo fue limar asperezas internas y preparar el terreno para una posible lista de unidad que enfrente a La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires. La charla giró en torno a temas clave: despidos, caída del consumo, crisis energética y la disolución de Vialidad Nacional, medida que calificaron como “un drama para la provincia”. Si bien no hubo definiciones sobre los nombres que encabezarán las listas, el acuerdo para avanzar con apoderados compartidos fue leído como un paso táctico para evitar fracturas de último momento. Cada sector (kirchnerismo, massismo y axelismo) tendrá representación en la Junta Electoral del frente, con al menos dos dirigentes por espacio, a fin de equilibrar fuerzas cuando llegue la hora de oficializar candidaturas. El encuentro comenzó pasadas las 15 horas y se extendió hasta bien entrada la noche. La tensión entre el axelismo y La Cámpora no es nueva: el entorno del gobernador ve con recelo que Máximo Kirchner pretenda sustituir a Cristina Kirchner en la Tercera Sección, aunque el propio jefe camporista tampoco estaría dispuesto a encabezar la nómina. Así, se mantiene una zona de indefinición que solo puede destrabarse con una nueva intervención de peso o un acuerdo de última hora. En este contexto, el acuerdo de “apoderados cruzados” funciona como una señal de orden interno en medio del ruido externo. Implica que ningún espacio podrá avanzar sin el aval de los otros, pero también que todos estarán representados en las decisiones clave del proceso electoral. “Apoderados y otras yerbas”, resumió con ironía uno de los asistentes a la cumbre, reflejando tanto la informalidad del diálogo como la profundidad del trasfondo político que se juega en estas horas. Diario TAPA DEL DÍA