Solicitan que la Asesoría de Incapaces intervenga tras el ataque vandálico en la Defensoría Oficial

En un nuevo episodio de violencia en el centro de Pergamino, un hombre de 43 años, con facultades psíquicas limitadas, protagonizó esta mañana un ataque contra la Defensoría Oficial, ubicada en Dorrego al 500, al arrojar una piedra contra el frente vidriado, provocando la rotura de un ventanal.

Según informaron fuentes de la dependencia, el sujeto se presentó para reclamar el cobro de una pensión, pero al recibir la explicación de que ese trámite no se gestiona en esa oficina, reaccionó con gritos y violencia. Este hecho reaviva la preocupación por la falta de medidas de contención y seguimiento de personas con conductas riesgosas.

No se trata del primer incidente. Semanas atrás, el mismo individuo había agredido a una empleada de la Defensoría y causado daños en las instalaciones de la sede de Dorrego 546, incumpliendo una prohibición de acercamiento previamente dictada. Testigos aseguran que “anda a la deriva” y suele exaltarse cuando no obtiene respuestas a sus pedidos.

Tras el ataque de este martes, se implementó un operativo cerrojo entre la Policía y la Patrulla Urbana municipal. El hombre fue interceptado por el móvil 26 de la Patrulla Urbana en inmediaciones de avenida Juan B. Justo y trasladado a la Comisaría Primera. La causa se encuentra bajo la carátula de “Daño”, en la Unidad Funcional de Instrucción N° 5.

La Policía del Comando de Patrulla lo trasladó aprehendido a la Comisaría Primera - foto La Opinion

El comisario mayor Mario Demaestri, al frente de la Jefatura Departamental, confirmó que la detención se produjo minutos después del hecho y que varios testigos ratificaron la autoría del ataque.

El episodio genera interrogantes sobre la demora de la Asesoría de Incapaces en intervenir ante personas con reiterados comportamientos violentos que afectan a terceros y ponen en riesgo la convivencia en la ciudad. Funcionarios judiciales y policiales subrayan que se trata de un caso que requiere un abordaje integral, que hasta el momento no se ha concretado.

Este incidente se suma al debate sobre la eficiencia de algunas dependencias judiciales en la protección de la comunidad, frente a individuos que presentan conductas erráticas y potencialmente peligrosas. La sociedad exige respuestas concretas y medidas de contención efectivas.

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