TAPA DEL DÍA  El pergaminense, José Luis Espert, diputado nacional por La Libertad Avanza y una de las voces más mediáticas del oficialismo en el primer tramo de la gestión, decidió bajar su perfil de manera abrupta. La decisión genera sorpresa incluso dentro del Congreso, donde su presencia solía ser constante tanto en los medios como en los debates clave del recinto. El legislador que preside la Comisión de Presupuesto y Hacienda, enfrenta críticas de la oposición por el virtual cierre de ese espacio estratégico. Desde marzo a la fecha, apenas se realizaron 15 reuniones, de las cuales solo 7 fueron convocadas por Espert, y todas enfocadas en el régimen penal juvenil. El resto se activó por presión de los bloques opositores. El silencio del economista no pasa desapercibido. En los últimos días, ni siquiera el escrache sufrido en su vivienda —donde arrojaron estiércol en la puerta— lo motivó a romper el hermetismo. Legisladores de distintas bancadas destacan que aún no fue convocada la discusión por el Presupuesto 2025, pese a que Espert había anunciado su tratamiento a fines del año pasado. Una fuente parlamentaria cercana a la conducción de la Cámara baja reveló que la estrategia se mantiene: “La comisión sigue cerrada, que busquen el número y la emplacen en el recinto”, dijeron, en alusión a la necesidad de conseguir mayorías para forzar su funcionamiento. Desde Unión por la Patria, la diputada Silvina Ginocchio, presidenta de la Comisión de Cultura, reclamó que hay al menos 23 expedientes que no se pueden tratar por la inacción de Presupuesto. “Vamos a seguir insistiendo”, advirtió durante una reunión informativa esta semana. La situación podría escalar tras el receso invernal. El próximo 4 de agosto, la oposición buscará reactivar el Congreso con una sesión que intentará insistir con la ley de emergencia para Bahía Blanca —vetada por el Ejecutivo— y forzar un nuevo emplazamiento a Espert para que habilite el tratamiento de los proyectos impulsados por los gobernadores. Sin embargo, lo que más ruido genera es su repentina desaparición del escenario público. Distintas fuentes del armado electoral bonaerense señalaron que Espert quedó fuera del reparto de lugares en las listas para octubre, a pesar de haber pedido entre 3 y 5 lugares para su sector. La encargada de la definición fue Karina Milei, y el revés fue leído como una señal clara de debilitamiento interno. “Perdió peso político y bajó el perfil”, sintetizó un operador libertario que sigue de cerca los movimientos en Diputados. La posibilidad de que Espert encabece la boleta libertaria en las legislativas nacionales queda ahora bajo una fuerte incógnita, más aún cuando su rol en la Cámara se ve reducido a cumplir con la estrategia de dilación que emana desde la Presidencia del cuerpo y de la Casa Rosada. En este contexto, la pregunta que muchos se hacen en el Congreso es si el silencio de Espert es apenas una pausa táctica o el inicio de un lento desplazamiento. La respuesta, coinciden oficialistas y opositores, dependerá de cómo se acomoden las fichas tras la sesión de agosto. www.tapadeldia.com