TAPA DEL DÍA El Gobierno encara los últimos días antes del 7S en medio de una situación inesperada y delicada. La difusión de los audios atribuidos a Karina Milei, presuntamente grabados en Casa Rosada, abrió un frente judicial que permitió a Javier Milei y su hermana denunciar una supuesta operación de inteligencia destinada a controlar la agenda pública y contener la proliferación de filtraciones. El juez civil y comercial Alejandro Maraniello, protagonista de la contraofensiva judicial, acumuló en los últimos meses varias denuncias y dispuso la prohibición de publicación de los audios de la secretaria General, un hecho que especialistas en constitucionalismo advierten como un atentado a la libertad de expresión. El Gobierno no anticipó llegar al tramo final de la campaña con la interna de La Libertad Avanza al rojo vivo, el consumo en caída y vínculos deteriorados con aliados estratégicos. La filtración de audios de Diego Spagnuolo, ex titular de la ANDIS, reveló posibles irregularidades en el corazón de LLA y tensionó la relación entre Milei y colaboradores históricos como Nicolás Posse, Ramiro Marra y Spagnuolo mismo. La reacción del electorado afín a LLA fue inmediata. Encuestas recientes muestran un impacto negativo en la imagen de la familia Milei, con un aumento notable de menciones críticas en redes sociales y la suspensión de actividades públicas de Karina Milei en distritos clave como Azul y Olavarría. La campaña provincial atraviesa ahora un clima de inquietud y pesimismo, con especial atención a la primera sección electoral, donde se espera un resultado extremadamente ajustado. Mientras tanto, el kirchnerismo observa con atención y busca capitalizar el malestar social generado por la caída del consumo en el Gran Buenos Aires. Apariciones públicas de Sergio Massa y eventos con referentes de la industria y pymes buscan reforzar la percepción positiva hacia los oficialismos provinciales en la antesala del domingo electoral. Por su parte, Milei cerrará la campaña en Moreno, con un acto centrado en denunciar una supuesta operación de inteligencia y victimizarse por las filtraciones, mientras desde la Casa Rosada se intenta sostener una sensación de control a pesar de la turbulencia institucional que atraviesa el Gobierno libertario. En paralelo, circulan rumores sobre posibles cambios en áreas estratégicas y reacomodamientos en la estructura de poder de LLA, cuyo impacto podría percibirse inmediatamente después de las elecciones de octubre. El desenlace del 7S será clave no solo para medir la fuerza de La Libertad Avanza, sino también para anticipar cómo se reorganizará el oficialismo en medio de un clima político y judicial extremadamente complejo. Opinión pública: Analistas y operadores políticos coinciden en que la combinación de filtraciones, audios polémicos y tensión interna podría afectar la movilización del electorado libertario, consolidando un escenario de polarización con riesgos para la imagen del Gobierno y la credibilidad de sus figuras más visibles. TAPA DEL DÍA