Grupo de Medios Infopba
Instagram

Entérate primero

Síguenos en Instagram

Pergamino

Nuevo ataque al Jardín 926 y al CEC 801: otro robo profundiza la alarma en el barrio Kennedy

#Pergamino | En menos de una semana, el edificio que comparten el Jardín de Infantes Nº 926 y el CEC Nº 801 volvió a sufrir un violento episodio de robo y vandalismo. Faltantes clave, daños en equipamiento escolar y una comunidad exhausta por la falta de respuestas.

  • 01/12/2025 • 10:25

El edificio educativo ubicado sobre la calle Güiraldes al 2000, donde funcionan el Jardín de Infantes Nº 926 y el Centro Educativo Complementario Nº 801 “Centro Mi Casa”, volvió a ser blanco de intrusiones durante la madrugada del último fin de semana. Se trata del segundo ataque en apenas pocos días, una reiteración que incrementa la preocupación de toda la comunidad del barrio Kennedy y deja en evidencia la vulnerabilidad del establecimiento.

Según detallaron las autoridades a TAPA DEL DÍA, los intrusos forzaron aberturas que ya habían sido dañadas en el episodio anterior y recorrieron distintas áreas del edificio con total libertad. Revisaron aulas, rompieron mobiliario, dañaron cerraduras y sustrajeron elementos indispensables tanto para el Jardín como para el CEC 801. La zona, rodeada de predios industriales y depósitos, carece de movimiento nocturno, lo que facilita estas acciones sin que nadie pueda advertirlo.

En esta nueva incursión se llevaron cuatro ventiladores, dos hojas de ventana de aluminio y distintos elementos de uso cotidiano. También abrieron armarios, forzaron puertas internas y provocaron daños que ahora deberán ser reparados con recursos que las instituciones no siempre poseen. El sector de cocina resultó nuevamente el más afectado: desaparecieron insumos alimentarios destinados a las viandas del CEC, utensilios, artículos de limpieza y hasta la reja de la medianera, arrancada por completo.

La directora del Jardín definió la escena como “desoladora” y explicó que durante la mañana del lunes personal de la Policía Científica trabajó en los peritajes para reconstruir el recorrido de los delincuentes y precisar los faltantes. “Rompen cerraduras, fuerzan candados… después es muy difícil recomponer todo esto. Cada cosa que se pierde cuesta muchísimo volver a conseguirla”, expresó con profunda preocupación.

La ubicación del edificio —aislado entre galpones y fábricas— lo convierte en un punto especialmente expuesto. Por eso, las autoridades educativas informaron que volverán a solicitar al Municipio refuerzos de vigilancia y patrullaje, en busca de medidas que permitan disuadir estos hechos. “Voy a pedir una reunión con el Secretario de Seguridad. Necesitamos presencia policial. No sabemos ya a quién acudir para que nos cuiden”, señaló la directiva.

El impacto también alcanza a los niños. La falta de ventiladores complica el normal desarrollo de las actividades en los días de calor, mientras que el robo de alimentos y elementos de higiene afecta directamente prestaciones básicas que reciben estudiantes de familias en contextos de vulnerabilidad.

Mientras la Policía continúa con las tareas investigativas, padres, docentes y personal del CEC y del Jardín intentan reorganizarse para restablecer el funcionamiento habitual. Sin embargo, la sensación predominante es la de agotamiento frente a una sucesión de hechos que se repiten sin freno y que generan un clima de desprotección generalizado. 

TAPA DEL DÍA: ante hechos que afectan directamente a la infancia y a instituciones esenciales, la comunidad reclama una respuesta que permita recuperar tranquilidad y continuidad educativa sin depender de esfuerzos aislados.

TAPA DEL DÍA