TAPA DEL DÍA — La provincia de Buenos Aires llevó adelante uno de los operativos más amplios del año para enfrentar delitos digitales contra infancias, y Pergamino tuvo un rol central. El Departamento de Cibercrimen local, dirigido por José María Cifuentes, y la Fiscalía Nº 3, a cargo del fiscal Nelson Mastorchio, encabezaron dos allanamientos clave en Pergamino y Manuel Ocampo que aportaron evidencia decisiva para la causa. Los procedimientos se enmarcaron en la “Operación Protección de las Infancias VI”, realizada el 2 de diciembre de 2025 y coordinada por el Ministerio Público bonaerense bajo la conducción del Procurador General Julio Conte-Grand. Este despliegue simultáneo alcanzó 117 domicilios en 73 localidades, con el objetivo de frenar la circulación de contenidos ilícitos previstos en los artículos 128 y 131 del Código Penal. Allanamientos derivados de reportes internacionales En el caso de Pergamino, los dos operativos surgieron a partir de reportes del Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados (NCMEC), organismo que rastrea alertas globales sobre actividad digital sospechosa. Con el acompañamiento técnico y operativo de la Policía Federal Argentina, los equipos locales concretaron ambos allanamientos focalizados en usuarios vinculados al tráfico de material ilícito. Durante las intervenciones se secuestraron dispositivos electrónicos de gran relevancia, que serán sometidos a pericias para analizar metadatos, historiales, conexiones internacionales y posibles vínculos con otras investigaciones abiertas. La articulación entre Cifuentes y Mastorchio busca consolidar una línea de trabajo basada en forensia digital, trazabilidad tecnológica y cooperación global. Un megaoperativo con hallazgos de alto impacto A nivel provincial, la coordinación estuvo a cargo del Departamento de Delitos Conexos a la Trata, Ciberpedofilia y Grooming, liderado por Eleonora Weingast, en conjunto con fiscalías especializadas de todo el territorio bonaerense. La sexta edición del operativo dejó datos contundentes: 112 personas investigadas, con edades entre 13 y 62 años, incluidos tres menores que compartían contenidos prohibidos. También se detectaron cuatro investigados que trabajan con infancias y dos integrantes de fuerzas de seguridad. Uno de los puntos más sensibles fue la identificación de 40 menores convivientes, lo que activó de inmediato los protocolos de protección correspondientes. Los allanamientos llegaron incluso a tres unidades carcelarias, donde se detectó contenido generado mediante inteligencia artificial, una modalidad que comienza a aparecer en investigaciones digitales complejas. Compromiso local en una política criminal moderna En total, la operación permitió secuestrar 81 computadoras, 191 dispositivos de almacenamiento, 211 teléfonos móviles y un arma de fuego, además de realizar 32 estudios preliminares en el lugar. La actuación del equipo pergaminense reafirma la importancia de contar con estructuras locales preparadas para intervenir en investigaciones tecnológicas de gran escala. La participación de Cibercrimen Pergamino en este operativo demuestra que la articulación entre procuración, fiscalías y organismos internacionales es hoy un pilar indispensable para proteger los derechos de niñas, niños y adolescentes en el entorno digital. Reflexión final El avance de estos operativos muestra un cambio histórico: la persecución penal de delitos digitales dejó de ser un trabajo aislado y se convirtió en una política coordinada que exige herramientas modernas, cooperación global y una mirada protectora sobre las infancias. Este enfoque, cada vez más robusto, marca un camino posible para enfrentar fenómenos que evolucionan con la tecnología. TAPA DEL DÍA