TAPA DEL DÍA La salida de los egresados del 6° año del Instituto Sagrado Corazón de Oliva hacia Bariloche se vio demorada este martes luego de que cuatro choferes dieran positivo en el test de alcoholemia antes de emprender el viaje. El operativo se llevó a cabo en la Terminal de Ómnibus de Oliva a pedido de los padres, quienes exigieron que los conductores fueran testeados antes de iniciar el recorrido. Según informó el secretario de Gobierno de Oliva, César Salvatori, los dos choferes originales del micro fueron sometidos a un control de alcoholemia que resultó positivo, impidiendo su salida. “Se les hizo un segundo control y también dio positivo”, detalló Salvatori. Tras la intervención de la jueza de Faltas, Marisa Bassano, se emitió una orden de inhabilitación para los choferes, quienes además deberán pagar una multa cercana a los $800.000. El plazo de la inhabilitación se definirá en los próximos días. Desde la empresa Flecha Bus, responsable del viaje, no se brindaron explicaciones sobre los resultados positivos. La compañía envió otra unidad con dos conductores de reemplazo, quienes también fueron sometidos a controles de alcoholemia antes de partir, arrojando nuevamente resultados positivos. Para despejar cualquier duda sobre el funcionamiento de los equipos de medición, se realizó un test al director del colegio, quien además es padre de uno de los egresados y no consume alcohol. El resultado fue cero, confirmando la correcta calibración de los dispositivos. Tras varias horas de incertidumbre y la intervención de la Policía Caminera, los choferes de reemplazo finalmente obtuvieron resultados negativos en un nuevo test. Esto permitió que los estudiantes pudieran subirse al micro y emprender su viaje hacia Bariloche con total seguridad. La situación generó preocupación entre los padres y vecinos de Oliva, quienes cuestionaron los controles previos de la empresa de transporte y resaltaron la importancia de garantizar la seguridad en viajes de estudiantes. Opinión pública: El hecho generó conmoción y debate sobre la responsabilidad de las empresas de transporte y la necesidad de controles estrictos en viajes de egresados. La rápida intervención de las autoridades y los padres fue clave para evitar un riesgo mayor, reforzando la idea de que la seguridad debe ser la prioridad en estos eventos. TAPA DEL DÍA