YPF informó que en el transcurso de esta semana aplicará una reducción promedio del 2% en el precio de la nafta en Argentina. La decisión, confirmada por el presidente y CEO de la compañía, Horacio Marín, se enmarca en una política de seguimiento permanente de las variables que inciden en el valor final de los combustibles. El directivo aclaró que la baja no será idéntica en todas las regiones del país y que los ajustes se realizarán de manera gradual. “Todos los días un poquito, no en todos los lados iguales”, sintetizó Marín, al explicar que la empresa adecúa sus precios en función de la oferta y la demanda. Desde su asunción a fines de 2023, el titular de la petrolera estatal sostiene que YPF impulsa lo que definió como un “acuerdo de honestidad con los consumidores”, basado en la idea de que los valores pueden subir o bajar según las condiciones del mercado. En ese sentido, la compañía busca reflejar con mayor precisión los movimientos del sector energético. En relación con el gasoil, Marín advirtió que el escenario es más complejo y que habrá ajustes diferenciados entre los distintos productos. “Uno hay que subir y uno hay que bajar”, señaló, al referirse a la necesidad de equilibrar costos y competitividad. La confirmación de la baja llega luego de un período de fuertes incrementos. En el último mes, el precio de la nafta súper en la Ciudad de Buenos Aires subió 4,5%, por encima de la inflación mensual estimada en torno al 2%. En términos interanuales, el aumento alcanzó el 41,2%, con el litro pasando de $1.108 en diciembre de 2024 a $1.564 en la actualidad, de acuerdo con datos del sector. La nafta premium también mostró subas relevantes: en el último mes trepó 3,5%, mientras que en la comparación interanual el incremento fue del 31,31%. El gasoil, en tanto, registró un alza mensual del 4,04% y una variación interanual cercana al 40%, con valores que rondan los $1.570 por litro. En este contexto, Marín destacó que el aumento de los combustibles durante el último año superó a la inflación acumulada, que se ubicó alrededor del 30%. La baja anunciada, aunque moderada, aparece como un gesto hacia los consumidores tras una seguidilla de ajustes al alza. Durante la entrevista, el presidente de YPF también se refirió al debate por la reforma laboral impulsada por el Gobierno y sostuvo que la modernización del marco normativo es clave para el sector energético. Según explicó, la competitividad resulta indispensable para sostener el crecimiento de la producción y las exportaciones. En ese marco, resaltó el rol estratégico de Vaca Muerta y el potencial del país para competir a nivel internacional. “Nuestro petróleo y gas compiten con los desarrollos de Estados Unidos. La geología nos ayuda, pero tenemos que ser igual de eficientes”, afirmó. Marín subrayó además que el desarrollo pleno de Vaca Muerta puede convertirse en un motor central para la economía argentina y destacó la necesidad de un país abierto y con reglas claras para atraer inversiones. “Al desarrollar un activo tan bueno, generamos riqueza y la sacamos del suelo. Ese es nuestro aporte al desarrollo nacional”, sostuvo. Opinión pública: la baja anunciada por YPF es acotada, pero simbólica. En un escenario de precios que vienen creciendo por encima de la inflación, cualquier corrección a la baja resulta relevante. El verdadero desafío será sostener una política previsible que combine competitividad, inversión y alivio gradual para los consumidores. TAPA DEL DÍA